El Covid 19 no solo está dejando a personas en sus casas, no solo está afectando al divertimento, al trabajo, a la economía, a las familias por quedar separadas, a las personas mayores…. También esta afectando a pacientes que están graves en las clínicas privadas y públicas.
Mi madre, Isabel de 68 años, de Honduras y con dos hijas en España, desde 2019 hasta hoy está viviendo una locura de sucesos médicos que más que una realidad, parece una especie de “burla”, un laberinto que cuando parece tener salida, otro pasillo se cruza, y otro y otro más…sin dejarnos salir. Llegados a tal punto, me encuentro en tal desesperación de hija, que recurro a GoFundme, como última esperanza, para costear los servicios sanitarios de mi madre y proteger su vida hasta dónde pueda.
Desde 2019 mi madre ha estado de ingreso tras ingreso. Acudió al hospital con un fallo cardiaco grave, consecuencia de una enfermedad periférica. A continuación, a ese diagnóstico mi madre sufrió dos infartos graves que le causaron varias complicaciones, la más grave: una trombosis que le afectó a su pierna derecha, obstruyéndole la artereas femoral y perónea. En enero de 2020 tuvo que ser sometida a una operación complicada, ya que no estaba respondiendo bien al tratamiento. Se sometió a una operación de angioplastia coronaria, y sufrimos otro duro revés… un grave infarto durante la operación que le causó estar semanas en la UCI. Mientras combatía su infarto en la UCI, no lograron frenar la trombosis. Tristemente, el 6 de marzo se sometió a la operación de amputación de la pierna derecha, lo que le rompió parte de sus ganas de continuar, mi madre es vital, joven, siempre ha estado sana y, perder una pierna, fue para ella uno de los golpes más duros, después de tanto médico, tantos gastos financieros para costearnos clínicas privadas, y ahora perdía la pierna. Mi madre necesitaba una buena noticia…. Ella, y su familia.
Y, después de esto, por supuesto quedaban más pasillos en ese laberinto… Un laberinto de desesperación, un laberinto que te agarra el corazón y tira de él mientras sientes cómo se te va desgarrando, cómo te vas quedando sin respiración, cómo no solo estás perdiendo a una madre, sino que además apenas puedes verla por la distancia. Ves cómo dan igual los costes que hayas invertido, cómo a nadie ni a nada le importas, y te das cuenta, que solo te queda una cosa: apelar a la humanidad, a la caridad, a la desesperación….
Mi madre, después de la amputación, sufrió una infección de la sangre (Septicemia), y ahora, está en una situación muy grave en el hospital. En Honduras ya ha llegado el coronavirus, y sabemos que si ese virus es otro pasillo más en nuestro laberinto, tendremos que despedir a mi madre para siempre.
Llevamos un año de médicos, de clínicas privadas, de mucho gasto…. Y lo que hemos conseguido es poner a mi madre al borde del abismo, en una clínica publica donde apenas tienen recursos. No sé si esto han sido negligencias médicas, el sistema de honduras, la mala suerte o el destino, no quiero buscar culpables ni razones en el poco tiempo que nos queda… Quiero ayudar a mi madre hasta su último aliento, cueste lo que me cueste.
La semana que viene, tendría que estar yendo a verla, y sin embargo no puedo viajar porque están restringidos lo vuelos procedente de españa y cancelación del vuelo por el Covid 19, una amiga, una gran amiga, me aconsejó hacer esto. Apelar a las personas a través de GoFundMe. No sé si resultará, si conseguiré ayuda, pero al menos, sé que estoy haciendo todo lo posible por mi madre.
Por favor, necesito vuestra ayuda para poder trasladarla otra vez a una clínica privada, dónde están más prevenidos contra el coronavirus, dónde tienen más medios para controlar a mi madre, más reacción de respuesta si empero drásticamente. En definitiva, más posibilidades de sobrevivir….
Durante todo el año pasado, hemos invertido todo lo que teníamos, y no tenemos capacidad para nada más. Cualquier ayuda, pequeña, de palabra, de ánimo… será agradecida.
Mamá, lo conseguiremos.