Mi nombre es Manuel Méndez, tengo 22 años y estoy viviendo en España desde hace un año y medio. En febrero fui seleccionado para formarme en Alemania, con la empresa Ryanair, como sobrecargo de vuelo. Esta selección significó un gran logro para mí, ya que es un proceso de selección difícil y quedar escogido me brindaba la oportunidad de desarrollar una carrera y mantener un trabajo estable. Lo que no sabía era que luego de esa gran noticia mi vida iba a cambiar completamente de la noche a la mañana.

El 24 de febrero de 2020 llegué a Hahn, Alemania, y al transcurrir las horas comencé a presentar dolores de cabeza constantes y cada vez más intensos, no podía soportarlos. El 26 de febrero, tuve que ingresar a emergencias por la grave intensidad de los dolores de cabeza y, luego de pasar aproximadamente una semana hospitalizado, me informaron que tenía un tumor cerebral (Craneofaringioma) y que debía ser operado lo más pronto posible. El hospital donde me encontraba no tenía los equipos necesarios para realizar la operación y asistencia en neurocirugía, así que me enviaron a otro de manera ambulatoria. Sin embargo, en Alemania resultaba imposible cubrir el costo de la operación, las consultas y la estadía durante el postoperatorio, ya que no tenía donde quedarme mientras me autorizaban a viajar después de la cirugía. Es por ello que decidí regresar a España, en donde al menos cuento con seguridad social que me puede cubrir el alto costo de la operación.

Durante el mes de marzo estuve asistiendo de emergencia a distintas consultas médicas y viviendo en casa de amigos, ya que no podía trabajar por mi condición de salud. La endocrinóloga, en Madrid, me dio dos posibles diagnósticos: Craneofaringioma o Quiste de Rathke. Sin embargo, para poder tener un diagnóstico final y operarme me remitió de urgencia con el neurocirujano y el oftalmólogo. Estas consultas fueron suspendidas, debido a que en marzo se agudizó la situación en España, a causa de la pandemia del Coronavirus, y todo se complicó aún más. Los doctores pospusieron todas las consultas hasta el mes de junio y todavía no han podido fijar la fecha de la operación. Este tumor me está causando una diabetes incipiente para lo que me recetaron un tratamiento costoso con una dosis que no cubre la seguridad social en España. Además, mi visión se está viendo cada vez más comprometida, impidiéndome desarrollar distintas actividades diarias. Mientras toda la situación sanitaria mejora, sigo en Madrid esperando, sin poder viajar a ninguna parte, viviendo en un apartamento alquilado, sin poder trabajar y con muchísimas dificultades por mi condición a pesar de toda la ayuda familiar que he recibido para costear el alquiler, comida, medicinas, entre otros.

La finalidad de esta iniciativa es poder recaudar los fondos necesarios para cubrir parte de los gastos de manutención en Madrid mientras espero el día de la operación y logro recuperarme al punto de poder viajar a casa de mi tía en Italia, en donde me voy quedar mientras me recupero y estoy listo para volver a trabajar y costear mis gastos.

Esperé hasta el último momento para iniciar esta campaña confiando en que la operación tendría lugar en marzo y ya para esta fecha me habría ido a casa de mi tía, pero las circunstancias cambiaron inesperadamente. Cada granito de arena significa mucho para mí en este momento. Les voy a estar siempre agradecido por cualquier ayuda que me puedan brindar, por su apoyo y sus oraciones para que todo salga bien.

Gracias,

Manu.